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Si has llegado a este artículo, seguramente, es porque te has preguntado por qué hay psicólogos que son Psicoanalistas u otros que son Cognitivos Conductuales.
Aunque existente muchas vertientes desde donde se puede trabajar en psicología; generalmente estas dos vertientes son las más conocidas o las más comunes entre los psicólogos, aunque en muchas ocasiones no todos los psicoanalistas son psicólogos, aunque sí en general los psicólogos cognitivo-conductuales sí suelen serlo.
En este artículo voy a intentar ayudarte a diferenciarlas, sobre todo para ayudarte a elegir, sin criticar, sino intentando informar de forma sencilla para que puedas tomar la mejor decisión para ti.
El Psicoanálisis y la Terapia Cognitivo-Conductual (también llamado TCC) son dos enfoques muy diferentes en la psicoterapia. Ambos tienen sus propias formas de abordar los problemas de salud mental. A continuación, veremos cada uno de ellos por separado y luego haremos una comparación entre los dos.
El psicoanálisis es un enfoque de terapia psicológica que se basa en la teoría de Sigmund Freud. Se centra en el estudio de los patrones inconscientes de conducta y pensamiento que están relacionados con los problemas de salud mental. El objetivo principal del psicoanálisis es ayudar a las personas a comprender y controlar sus emociones, pensamientos y acciones a través de la exploración de sus memorias, sueños, fantasías y experiencias. El tratamiento se centra en la exploración de los patrones inconscientes de pensamiento y comportamiento a través de una serie de técnicas, como podría ser por ejemplo la asociación libre, la interpretación de los sueños o la transferencia.
Uno de los principales beneficios del psicoanálisis es que le permite a la persona una mayor comprensión de sí misma y de los factores que contribuyen a su estado de ánimo y comportamiento. También da ciertas explicaciones del porqué de esos estados o sus comportamientos, cuestiones que a muchas personas les da tranquilidad y que pueden ayudar a tomar mejores decisiones y a controlar sus emociones.
Algunos profesionales creen, que puede beneficiosa de tratamiento a largo plazo. Esto se debe a que se enfoca en el pasado, relacionándolo en el presente, para ayudar a las personas a comprender mejor sus patrones de pensamiento y comportamiento. Hay que entender que el psicoanálisis actual ha evolucionado, es más dinámico e intenta tener un enfoque más práctico.
La terapia cognitivo-conductual (TCC) es una forma de tratamiento psicológico centrada en el presente que se enfoca en el cambio de los patrones de pensamiento y comportamiento. Se basa en la teoría de que los pensamientos, emociones y comportamientos están interrelacionados y que los cambios en un área pueden tener un impacto en las otras.
La TCC se centra en el aprendizaje de habilidades de afrontamiento y en la identificación de pensamientos y comportamientos que pueden estar contribuyendo a los problemas de salud mental. Los terapeutas utilizan técnicas como, por ejemplo: la exposición, la relajación, la reestructuración cognitiva o el entrenamiento en habilidades sociales para ayudar a las personas a desarrollar mejores estrategias de afrontamiento para enfrentar sus problemas o gestionar cierta sintomatología.
La TCC también se enfoca en el cambio de los pensamientos y comportamientos, lo que puede llevar a una mejor comprensión de las emociones. Esto también ayuda a las personas a tener una mejor comprensión de sí mismas y de los factores que contribuyen a su estado de ánimo y comportamiento. Trabajando muchas veces la psicoeducación, que es el método para ayudar a que la persona se eduque sobre su propio estado o su propia forma de actuar y/o pensar.
Ambos enfoques, el psicoanálisis y la TCC, se enfocan en la comprensión y el control de los pensamientos, emociones y comportamientos, así como en la identificación de patrones que contribuyen a los problemas de salud mental. Sin embargo, hay algunas diferencias importantes entre las dos vertientes.
Una de las principales diferencias entre el psicoanálisis y la cognitivo-conductual es el enfoque. El psicoanálisis se enfoca más en el pasado, mientras que la TCC se enfoca más en el presente.
Otra diferencia entre los dos enfoques es el tiempo de tratamiento. El psicoanálisis se considera un tratamiento a largo plazo, mientras que la Terapia Cognitivo-Conductual se considera un tratamiento a corto plazo y más centrado en el problema.
Por último y para resumir, el psicoanálisis se enfoca en la comprensión de los patrones inconscientes de pensamiento y comportamiento, mientras que la TCC se enfoca en el cambio de los pensamientos y comportamientos.
En conclusión, el psicoanálisis y la TCC son dos enfoques muy diferentes en la psicoterapia; y la elección como paciente de este tipo de terapia, es como todo en la vida, depende de los gustos, las motivaciones y los intereses que desees trabajar como paciente. No voy a entrar si una es mejor que la otra, o si una está más comprobada que la otra, porque son dos vertientes donde se ha investigado bastante y se ha trabajado bastante, y lo mejor, es que seas tú el que decida cuál te llama más la atención y se adapta a tu forma de ser y que, sobre todo, resuelva tu problema.
Adendas, actualmente en ciertos países se prioriza el trabajo con la Terapia Cognitivo-Conductual a nivel formativo, como puede ser en Estado Unidos, Europa o en España mismo; y el Psicoanálisis suele utilizarse más en Latinoamérica. En Terapiaencasa.es trabajamos desde la TCC como vertiente principal, ya que, por el formato de trabajo online, por experiencia y por qué nos sentimos más a gusto, es la vertiente que hemos visto que tiene mejores resultados.
Así que si necesitas hacer una terapia psicológica basada en la terapia cognitivo-conductual, ponte en contacto con nosotros.